Domingo 14. Propósito

"Y se levantó Manoa y siguió a su mujer; y vino al varón y le dijo: ¿Eres tú aquel varón que habló a la mujer? Y él dijo: Yo soy."
Jueces 13:11.

Hoy como siempre me desperté después de que sonó el despertador, me levante puse el agua para el mate, y mientras se calentaba la pava, me lavaba la cara en el baño. Antes que hierva me hice unos buenos mates entrerrianos tomé mi biblia y luego de un devocional comencé mi día. No se si te pasa que a veces nos parece que la vida es siempre la misma rutina y nos sentimos aburridos o ya no le encontramos el sentido. Hace un tiempo entendí que Dios, ese mismo que te creó el que te pensó aún antes de hacer el universo no nos hizo porque si, tampoco para vivir una vida de rutina aburrida. Dios te hizo porque te ama y para Él sos importante, tiene un propósito para tu vida y para la mía. Manoa y su mujer escucharon la voz de Dios, Él tenía algo preparado para ellos y lo tiene para cada unos de nosotros. Ellos hicieron caso a su llamado y pudieron vivir conforme a la voluntad de Dios. Ahora Dios te está llamando a vos. Él quiere que vivas conforme a su propósito, eso si tendrás que estar preparado porque una vida así está llena de aventuras.

Cambiando la rutina.

Por Aléxis Barolin.

Sábado 13. La venida del Señor.

“He aquí vengo pronto”
Apocalipsis 22: 7

“Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, descenderá del cielo.”
1ra de Tesalonicenses 4:16


¿Alguna vez te imaginaste como sería cuando el Señor volviera a buscar a sus hijos? Yo lo he hecho muchas veces, pero no alcanzo a entender ó imaginarme con claridad como será todo en ese momento. Lo que se es que aquí quedará la ropa que tengo puesta, mis lentes, el arreglo de la muela…, todo aquello que es material quedará en este mundo. Pero nosotros, los que hemos aceptado a Cristo como Salvador personal, los que nos hemos arrepentido y hemos sido limpiados del pecado por la sangre de Cristo; seremos llevados, para encontrarnos con el Señor en el aire. ¡Que paz nos da pensar que ese día se aproxima! ¡Saber que Dios no se olvida de cada uno de sus hijos y que Cristo no se olvidará de ninguno!
Es hermoso pensar estas cosas, y mucho más saber que la paz y la felicidad plena la tendremos cuando estemos en la misma presencia de nuestro Señor Jesús. Allí entenderemos todo, absolutamente todo.
Pero, ¿pensaste en las personas que no se irán con Cristo?, ¿la desesperación de una madre, un padre, un abuelo, un marido? Y aún más; ¿pensaste alguna vez que esas personas no solo se sentirán tristes, sino que les espera la condenación eterna, el infierno por toda la eternidad? Cuando medito de esta manera querido lector, me siento un egoísta. Por eso te animo a que el día de hoy, ores por tu vecino, compañero del trabajo, amigo de la escuela o la facultad, por tu familiar que no conoce a Cristo. Pero además de orar, que le prediques el evangelio. Te desafío en este día a que le compartas aunque sea a una persona del amor de tu Salvador.

Para quitar almas de las manos de Satanás, hay que hablar del amor de Cristo y de la cruz, ¿estas dispuesto a hacerlo hoy?

Por Andrés Vellano.

Viernes 12. ¿Y dónde están? ¿Dónde están los que me iban a seguir?

"Después de todo esto, José de Arimatea que era discípulo de Jesús, pero secretamente… también Nicodemo, el que había visitado a Jesús de noche…"
Juan 19:38 y 39


El capitulo 19 del Evangelio según Juan es muy hermoso como toda la Palabra, pero en este si lo leemos cuidadosamente tomaremos un montón de enseñanzas para nuestras vidas. Por ejemplo aquí, piensa cuántas veces le prometiste algo a Dios quizás en momentos de tristeza, y nunca lo pudiste cumplir.
Jesús fue sepultado y nadie estaba allí para darse a conocer como un amigo de Él, solo aquellos que ni tú ni yo los consideramos como grandes hombres de Dios, pero sí, se la jugaron por el Señor. Quizás no prometieron nada, pero actuaron cuando el momento les dio la oportunidad de hacer algo para Dios.
¿Estamos trabajando para el Señor o para hacernos ver? Estos hombres lo hicieron por amor a aquel que los había salvado y cautivado su corazón.
Gracias a Dios, en la Iglesia hay muchos hermanos que trabajan para la obra del señor en lo secreto de su corazón. No digo que estén mal las cosas que nos puedan hacer ver siempre y cuando no nos gloriemos. Quiero que nos fijemos y meditemos si no estamos prometiendo cosas que no podemos cumplir. Lee Jn.19, no es un gran esfuerzo y será de gran bendición, solo detente cada vez que no entiendas algo y pídele al Señor que te lo haga comprender.

Mucha lectura: mucha sabiduría;
Poca lectura: poca sabiduría;
Nada de lectura: nada de sabiduría.
Con sabiduría es más fácil seguir a Jesús.

Por Pablo Baztan.