Jueves 04. No está aquí.

“No está aquí, pues ha resucitado”
Mateo 28: 6


“No esta aquí” fueron las palabras del ángel que estaba en la entrada de la tumba donde fue puesto el Señor. Esa declaración maravillosa es la consumación perfecta de la obra que Jesús vino a hacer en este mundo. Descendió para morir por nuestros pecados y resucitó para vencer el imperio de la muerte.
Cuando Maria Magdalena y la otra Maria fueron al sepulcro por la mañana (Mt. 28:1). Esperaban encontrar el cuerpo del Señor para ungirle con especias aromáticas. Esas mujeres estaban todavía tristes por la muerte del Señor. Estaban preparadas para derramar el perfume sobre el cuerpo sin vida de su Señor. Pero en lugar de eso se encontraron con un ángel de Dios, que tenia aspecto de relámpago. Ellas se asustaron, pero el ángel les dice que ya no estaba allí, ¡¡¡QUE HABIA RESUCITADO!!!
De pronto todo cambió, no mas llanto, ahora gozo. El pecado puede ser borrado por la sangre de Cristo, y así como la El resucitó. Los creyentes resucitaran a la nueva vida, para pasar la eternidad junto a Dios y junto a nuestro Señor y Salvador.
Recordemos siempre la letra del himno que dice: “la muerte ha vencido, grata y gloriosa noticia. Si, Cristo ha resucitado y pronto en su Gloria vendrá”
La maravilla más grande que tenemos los hijos de Dios en confiar en un Salvador que hizo todo por nosotros. Murió, nos perdonó y resucitó. Vivamos confiando plenamente en cada promesa que tenemos y seamos fieles.

Por Andrés Vellano.