Sábado 14/ Domingo 15. A la cena.

"Porque el que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí. Por tanto, pruébese cada uno a si mismo, y coma así del pan, y beba de la copa."
1ra de Corintios 11:29,28

Querido hermano/a, tú y yo hemos estado en la cena del Señor por mucho tiempo, o no tanto, pero hablo contigo que eres salvo y que te has bautizado y por eso estás participando de los símbolos en tu iglesia.
Es una de las reuniones más emotivas y hermosas por el contenido y lo que es en realidad, en estas reuniones recordamos lo que nuestro Señor Jesucristo hizo por nosotros.
En la antigüedad, había hermanos que no lo hacían como corresponde; tomaban todo para la chacota, se emborrachaban, eran glotones y se comían todo el pan sin dejar para los demás.
Por eso el apóstol Pablo tuvo que intervenir y amonestarles, y esa enseñanza hoy nos sirve a nosotros.
En la palabra dice que debemos comer del pan y beber del vino, discerniendo el cuerpo de Cristo, esto es teniendo presente lo que estamos recordando, que es la muerte, sepultura y resurrección del Señor Jesús, y esto se debe hacer con el respeto que merece.
También dice la palabra que debemos probarnos cada uno, cómo estamos delante del Señor, si hemos ofendido a un hermano o amigo, no debemos participar antes de arreglar el asunto o al menos de pedir perdón a la persona; y si hemos pecado contra Dios, también primero arreglar con Dios, así sí podremos dar las ofrendas de labios que confiesan su nombre, porque es mejor obedecer que las ofrendas. 1ª Samuel 15:22
¿Cómo estás para el domingo?

¡Prosigue el blanco, Dios te bendiga!

Por Pablo Baztan.