Lunes 09. En el día del Señor.

“Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mi una gran voz como de trompeta.”
Apocalipsis 1: 10


El apóstol Juan escribió tres epístolas (1ra, 2da y 3ra de Juan); El evangelio de Juan y el libro de las Revelaciones o Apocalipsis. El pasaje del encabezado, este lo escribe en un momento muy difícil de su vida. Juan estaba preso y desterrado en la isla de Patmos; debido a la persecución que tenían los creyentes en esa época. A esto se le suma que el apóstol no era un jóven sino una persona mayor, lo que le implicaba tener limitaciones físicas.
Pero merced a lo antes dicho, y merced a las circunstancias en las que este discípulo estaba. Leemos que antes de ver a Jesucristo en visión, Juan estaba “en el Espíritu”; es decir, que su confianza y fe en Dios nunca flaqueó. Por más que estaba preso, desterrado y viejo. Siempre estuvo fiel a la decisión de seguir a Cristo hasta la muerte. Y estoy seguro que esa comunión fue la que lo llevo a tener el privilegio de ver y posteriormente escribir las revelaciones del Apocalipsis.
¡Cuánto hay que aprender de este discípulo! Que hoy sea un día en donde estemos en comunión con Dios, que podamos oír su voz y ser fieles más allá de las circunstancias.

Que Dios nos ayude a vivir en el Espíritu cada día.

Por Andrés Vellano.