Martes 02. Lágrimas.

“…aunque vosotros estéis tristes, vuestra tristeza se convertirá en gozo. La mujer cuando da a luz, tiene dolor, porque ha llegado su hora; pero después que ha dado a luz un niño, ya no se acuerda de la angustia por el gozo de que haya nacido un hombre en el mundo.”
Juan 16: 20-21


Es casi un ley general que todos pasamos por las lagrimas alguna vez. Unos más que otros; pero al fin, cada hombre y cada mujer de este mundo por más fuerte que parezca se desdobla en lágrimas de amargura por tal o cual tema. A veces la familia, una enfermedad, un trabajo, una relación, una decepción, ó algo que escapa a nuestras manos.
Sería más fácil si pudiéramos tener las respuesta a cada una de nuestras preocupaciones, seria sencillo tener la respuesta y así tomar la elección correcta. Pero no es así, no conocemos lo que va a ocurrir mañana y no sabemos si la decisión que tomamos es la correcta. Y equivocarse tiene su precio, y en ocasiones es muy alto.
El Señor Jesús nos dice que cada una de nuestras lágrimas se convertirá en gozo. Esto sucederá cuando estemos en la misma presencia de Dios. Pero también en este mundo, cuando el dolor cala en nuestra vida, podemos acudir en oración al Padre, y el enjugará cada una de nuestras lágrimas y nos dará la mejor decisión en el tema que sea. Solo oremos y confiemos que todo esta bajo su divino control. Y la situación que nos deprime, mañana nos hará feliz, cual la mujer que llora en el parto, después se goza en su hijo.

Sea por el tema que sea, dejá que Dios limpie tus lágrimas.

Por Andrés Vellano.