"Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí."
Gal. 2:20
En matemáticas se utiliza un símbolo para expresar un número que es muy grande y se lo llama infinito (∞) existe un mas infinito (+∞) y un menos infinito (- ∞) dos extremos, y cuando veo estos números me acuerdo de Dios de su existencia eterna. El era desde “el principio” (-∞) y es hasta “el fin” (+∞). Pero en la mitad de estos dos números está el cero y muchos otros más (0,1,2,3…). Me hace pensar que en medio de toda esa eternidad estamos nosotros, pero no como un simple número más, algo que tal vez si seas en la facultad en el cole o en cualquier parte de esta sociedad, sino que estas siendo importante para el más importante de todos, si para Dios hoy en este momento sos importante, porque sino no se hubiera gastado en mandar a su único Hijo a morir por vos. ¿Y que hacemos acá? Nuestra misión es vivir como lo dice Pablo, “en la fe del Hijo de Dios” teniendo siempre presente que El está pendiente de tu vida, sabiendo que todo lo que hoy hagas tiene trascendencia eterna. Dios te necesita para cambiar un simple número en un ser trascendente. ¿TE SUMAS?
Por Aléxis Barolin.