Lunes 02. Un salmo de paz (II).

“En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará”
Salmo 23: 2


El versículo dos nos habla principalmente de los cuidados de Dios y de su provisión. Las aguas de reposo nos dan la seguridad y la paz. Aun en medio de un mundo que se destroza por la promiscuidad, y el pecado en todo su rigor; nuestro Pastor nos promete llevarnos a aguas de reposo. Aguas donde podremos beber seguros al cuidado de nuestro Señor. Así mismo nos provee de delicados pastos, esta provisión no es material, sino espiritual. Pastos que podremos disfrutar mediante la lectura de la Palabra de Dios.
Querido lector, aprendamos a confiar en las promesas de Dios, y dejarnos guiar por nuestro pastor a las aguas de reposo, a los delicados pastos. Allí nuestra alma encontrará la paz y la seguridad que el mundo no da.


Por Andrés Vellano.