“…derramaré sobre vosotros bendición”
Malaquías 3: 10.
Muchas veces vivimos quejándonos o siendo desagradecidos por lo que tenemos ó por lo que nos toca vivir. Creo que alguna vez te has sentido así, yo por lo menos en ocasiones siento esto.
Pero te invito a meditar, no sobre las cosas que no tenemos o que nos gustan, sino sobre todo lo contrario, a meditar sobre las bendiciones que nos da Dios día tras día. Tal vez lo pases por alto o lo des por sentado, pero seguramente en este día no te costó levantarte de la cama (hay personas que están postradas), seguramente hoy viste el sol (los ciegos no lo ven jamás), seguramente desayunaste o almorzaste (mucho no lo hicieron), seguramente alguien te dijo buenos días (algunos no tienen con quien hablar), seguramente sentiste frío y te abrigaste (algunos sienten frío y no pueden calentarse), puede que te hayas cruzado con un camión de bomberos o una ambulancia (tu casa no se quemó, ni eras tu el que estaba dentro de la ambulancia).
Dios nos da mucho cada día, ¿somos realmente agradecidos en relación a lo que recibimos?
Dios derrama cada día su bendición, seamos cada día agradecidos por ellas.
Por Andrés Vellano.