“Lámpara es a mis pies tu Palabra, y lumbrera a mi camino”
Salmo 119: 105
La provincia de Entre Ríos tiene la característica (como también otras provincias del país – Argentina-) de tener montes nativos. Esto se han ido perdiendo con los años, pero ese no es el punto. Imaginemos por un momento estar en pleno monte entrerriano y no solo esto, sino que además es de noche. En circunstancias de ese tipo, nos sería muy útil tener algún instrumento para iluminar el camino y así saber por dónde ir.
El mundo donde vivimos no es el monte entrerriano, sino algo peor; las tinieblas del pecado. Por eso es que cada persona que quiere seguir a Cristo debe ser guiado por una Lámpara. Pero no cualquier lámpara, sino la Lámpara que es la Palabra de Dios, esta es la Biblia. En ella encontramos el camino por donde debemos andar.
Este mundo nos ofrece muchas cosas lindas a nuestros ojos, pero el fin de ellas es un final amargo. Chicas embarazadas a una temprana edad, drogas, violencia, fornicación, adulterio, miseria, muerte, dolor, idolatría…, cada una de estas cosas no empieza así nomas. Sino que de a poco las tinieblas nos envuelven y para cuando queremos salir, las heridas se hacen notar.
Busquemos la verdad y sigámosla. Guiémonos por la verdadera Lámpara, que es la Palabra de Dios.
Por Andrés Vellano.