Martes 22. Engaño.

“Yo Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras."
Jer. 17:10.



Ayer yendo por la calle vi un niño vestido de Spiderman (hombre araña) que jugaba a ser ese personaje y me acorde de mi niñez donde me pasaba lo mismo y me creía realmente que yo era ese superhéroe metiéndome en el personaje. Por un momento estaba todo bien pero para los que me rodeaban tenía un limite debido a que me terminaba poniendo un poquito pesado. Por un momento nos creíamos superhéroes con superpoderes pero la verdad es que no los teníamos y por más que probábamos la tela de araña no salía de nuestras manos así como tampoco podíamos trepar paredes, entonces en algún momento nos teníamos que avivar y dar cuenta de que éramos en realidad solo personas de carne y hueso. Leyendo este pasaje me di cuenta de que cuando somos más grandes la cosa no es tan distinta, dice en Jer.17:9 que el corazón del hombre es engañoso y lo es de tal forma que a nosotros mismos nos hace creer que somos algo que en realidad no lo somos. Nos hace creer que somos ricos y que no tenemos necesidad de nada, sin embargo somos unos desventurados, miserable, pobre, ciego y desnudo. Ap. 3:17.

Nos nos engañemos, somos lo que somos (hijos de Dios). Solo por los méritos de Cristo.

Por Aléxis Barolin.