Lunes 23. Una flor seca.

“Porque separados de mí nada podéis hacer”
Juan 15: 5


Algo muy lindo que nos ha dado Dios a través de la creación, las flores. Tienen colores, olores y son lindas por donde se las mire. Además existen diversas variedades y tipos, margaritas, rosas, gladiolos, jazmines, y muchas más. Pero, todas tienen algo en común. Separadas de la planta que las nutre y les da de los alimentos necesarios, mueren. Por más que les brindemos nuestros cuidados, tarde o temprano morirán.
Los hijos de Dios somos como flores. Todos somos distintos, con diferentes formas de ser y de actuar. Tenemos actitudes que desprenden aromas hermosos y somos capaces de hacer brillar un sinfín de colores en nuestra vida. Pero también como las flores, si estamos separados de la Planta que nos da la vida, nos marchitaremos. Cristo Jesús es la planta que nos nutre y nos da la vida cada día. Si nos separamos de El, nada somos, nada valemos, “nada podemos hacer”. Somos solo pecadores que han alcanzado misericordia por la gracia y el amor de Dios. Sin Cristo en nuestra vida, caminamos hacia la condenación eterna. Pero cuando aceptamos a Cristo como Salvador, la vida cambia. Ahora que somos hijos de Dios, no debemos alejarnos de quien nos dio esa vida, y nos la da minuto tras minuto, Cristo.

Estemos cerca, muy cerca, así seremos flores hermosas cada día, para Dios.

Por Andrés Vellano.