“Porque él me esconderá en su tabernáculo en el día del mal; Me ocultará en lo reservado de su morada; Sobre una roca me pondrá en alto."
Salmo 27:5
Día Jueves 24 de Marzo fue para mí lo que se dice un día para el olvido. Desde su comienzo alguien que no estaba preparado diría que salió todo mal. Diría que Dios no se acordó de mi ese día. No te lo voy a contar pero imagínate que no te sale una, algo así es lo que pasó.
Hoy al leer este versículo entendí realmente lo que me estaba pasando por dentro aquel jueves, fue por eso que nunca me impaciente nunca cambió mi carácter y siempre tuve paz en mi interior. Me gusta pensar que esa paz es la que Jesús prometió a sus discípulos (S. Juan 14:27). Gracias a Dios hoy vos y yo somos poseedores de este regalo “La Paz de Jesús” en cada momento de nuestro día. No importa lo que pase o cual sea la circunstancia que nos toque vivir, solo debemos mirar al cielo y dejar cada carga en los pies de nuestro Señor.
Hoy puede ser un lindo día para mirar el cielo.
Por Alexis Barolin.