Miércoles 09. Firmes.

“Mantengamos firmes, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió”
Hebreos 10:23


Las grandes personas del mundo, dígase médicos reconocidos, literarios, grandes pilotos, exploradores, navegantes, etc. Tienen algo que los une, y es la perseverancia y firmeza. ¿Te imaginas cual diferente hubiera sido la historia si Cristóbal Colón se habría rendido en la primera oportunidad de conseguir buques para su expedición? ¿O si Jorge Luis Borges habría dejado de escribir después de que no tuvieran éxito sus primeros libros?..., mejor aun ¿si el apóstol Pablo habría abandonado su ministerio después de ser apedreado en Listra (Hch 14: 19)? Si vamos más lejos aún… ¿si Moisés se habría dado por vencido contra Faraón (Ex. 5)?
Es muy llamativo como el Apóstol nos enseña. A través de la inspiración divina del Espíritu de Dios; se nos pide a los creyentes, a ti y a mí, hoy en el siglo XXI. En primer lugar a estar firmes en la lectura de la Palabra y la vida en santidad. Y este estilo de vida debe ser sin fluctuar, es decir, no dudar ni vacilar de la elección de seguir a Jesucristo.
Nuestra profesión trae consigo una esperanza, pero una esperanza viva. Pues es promesa de Dios, y sabemos con certeza que estas se cumplen.
La vida de los hombres es como una leve neblina, aparece por unos momentos y luego desaparece. Aprendamos a vivir sana, santa y dignamente; estando firmes ante los vientos de tentación y las olas incertidumbre de este mundo, Amén.

Por Andrés Vellano.